El Análisis cabalístico
Publicado de Ricard Barrufet en Cábala Práctica · 3 Marzo 2016

El ser humano es una pequeña réplica del universo, con lo cual, este supremo conocimiento que los esenios poseían acerca de la configuración, ordenación y funcionamiento de la vida, podemos aplicarlo a cada persona en función del valor numérico que posee cada una de las letras que conforman su nombre, sus apellidos y su fecha de nacimiento. Estos únicos datos contienen toda la información energética que el alma de esa persona eligió para llevar a cabo su nueva experiencia terrena.
La Gematría es uno de los tres métodos utilizados por los antiguos cabalistas para reorganizar las palabras y las frases de los textos sagrados, con la finalidad de ampliar su significado, partiendo de la certeza de que cada carácter posee el valor numérico correspondiente a su ordenación alfabética. Los otros dos métodos son la Temurah y el Notarikon, pero estos son únicamente aplicables al alfabeto hebreo. Podría decirse que las letras son un como un recipiente o receptáculo de energía divina que, al traducirlo al idioma universal (los números), encuentran su lugar en este diagrama de la Geometría Sagrada que es el Árbol de la Vida cabalístico.
Así es como el Árbol de la Vida Personal adquiere la denominación de "mapa del alma", puesto que nos revela el recorrido energético que sigue la energía procedente del Cielo (la Fuente) y que, en su trayectoria descendiente, va atravesando cada una de las esferas o sefirot (nuestro particular mundo espiritual, mental y emocional) hasta que sale a relucir con nuestro sello personal en forma de palabra o acción.
La Cábala fue durante muchos siglos un conocimiento oculto enseñado únicamente a una minoría, porque se consideraba que al no estar aún la mayoría de las personas preparada para comprender semejante sabiduría, tanto podía correr el riesgo de acabar siendo aniquilada por la cruenta ortodoxia de la época, como hacer de ella un uso inapropiado. Algunos cabalistas llegaron incluso a propagar historias de tinte oscurantista, con la única intención de desalentar a la gente que se interesara por sus enseñanzas. De ahí que todavía haya quien ingenuamente relaciona la Cábala con las artes oscuras y la magia negra, pero nada más lejos de la realidad.
Adentrarse en el conocimiento de la Cábala es disponer a emprender un viaje de autodescubrimiento espiritual que afecta a todos los niveles: familia, trabajo, pareja, etc., y que nos conecta directamente y sin intermediarios a la Fuente de la Vida, a la Conciencia Cósmica o a Dios.
Ha llegado pues el momento en que la Cábala salga nuevamente a relucir con todo su esplendor y ofrezca a la humanidad todo su saber sin límites ni restricciones, ya que su única meta es, en realidad, ayudarnos a descubrir y mantener un contacto directo con el Espíritu, para que no precisemos más guía en nuestra vida, que la que recibimos de nuestro propio Maestro Interior.
Autor: Ricard Barrufet
Del libro: "A la Luz de los Números"